Reconexion Espiritual

TODA ENFERMEDAD ES IGNORANCIA Y LA CURA ES UNA:
RECONEXIÓN CON EL ESPÍRITU

Entrevista con el naturópata Albert García Serrats (Banijam)

 

¿Qué es la Enfermedad?

Es simplemente un desequilibrio originado por la ignorancia. Pero también es una vía de curación en sí misma ya que nos indica que algo debe cambiar en nuestra vida. En realidad la enfermedad es la infelicidad. No es sólo la manifestación de síntomas externos visibles sino toda obstrucción del libre flujo del amor y la felicidad. Una persona que no se siente bien, que no se siente contenta, equilibrada, llena de bienestar e ilusión, de un agradecimiento profundo y constante por vivir cada día, está en alguna fase de enfermedad. Las distintas manifestaciones físicas -desde un resfriado hasta un cáncer- y psíquicas -desde una depresión hasta una psicosis- son oportunidades que nos muestran la necesidad urgente de cambiar algo, aunque en ese momento quizá la persona no sepa qué es lo que hay que cambiar.

¿Toda enfermedad se genera a nivel emocional?

En realidad la enfermedad se produce en los planos más sutiles del ser, los cuales nunca han sido contemplados por la medicina oficial. De hecho, la medicina académica jamás conseguirá avanzar hasta que no reconozca que el ser humano es un ser espiritual. Es un ser psíquico que maneja un cuerpo, pero las emociones son el punto donde se genera la enfermedad. Lo que ya es alentador es que el mundo de las emociones finalmente ha sido reconocido por un gran médico que algún día va a ser recordado como un genio de la medicina: el Dr. Ryke Hamer. Él está enseñando a los médicos algo que todas las tradiciones de sabiduría siempre han manejado: que la enfermedad se produce por un impacto psíquico mal metabolizado psíquicamente, o sea que no se ha podido procesar y aceptar bien, como es el caso del cáncer. Y esto ha hecho que este hombre haya sido encarcelado y hoy esté siendo hostigado por sus descubrimientos. Y digo descubrimientos y no teorías, puesto que ya los ha comprobado científicamente. Lo que está haciendo es una ciencia aplicada y es incuestionable puesto que hay mucha gente curada que testifica a favor del método del Dr. Hamer.

¿En qué medida nuestro sistema de vida y de organización social contribuye a la enfermedad?

En gran medida. Por ejemplo tenemos las depresiones y las afecciones de la vista provocadas por el trabajo con ordenadores y los trastornos nerviosos provocados por trabajar constantemente sometidos a campos electromagnéticos, como es el caso de los trabajadores de las líneas eléctricas o de metros, trenes, ferroviarios, etc. También tenemos las intoxicaciones y los casos de cáncer directamente atribuido al trabajo con amianto, colorante, insecticidas, herbicidas, fungicidas, etc. Digamos que hoy en día la mayoría de los trabajos pueden ser peligrosos. Por eso nosotros pensamos que lo que realmente está enfermo es el sistema en que vivimos, el sistema socio-económico. Está enfermo y provoca enfermedad, porque en realidad no necesitamos tanto para vivir, la naturaleza es abundante. Si supiésemos simplificar nuestro mundo, si supiésemos vivir de una forma sencilla necesitando menos, también podríamos disponer de mucho más tiempo para nosotros. Hay otra cosa peligrosa en el sistema laboral actual y es que nos absorbe demasiado tiempo y no nos permite dedicarnos a nosotros mismos y a nuestra familia y ahí empieza la enfermedad, una enfermedad social, una nueva esclavitud al horario, al reloj antinatural y al trabajo monótono. También es antinatural hacer siempre lo mismo. Por eso el sistema completo debe de cambiar.

¿Qué es la curación?

La curación es el camino hacia el reequilibrio y automáticamente hacia un grado más de evolución ya que una enfermedad siempre es resultado de una crisis, y si la manejamos bien, si la comprendemos y la trascendemos, esta crisis nos lleva a otro nivel de conciencia de nuestra propia realidad. Cuando llegamos a la auténtica curación, comprendemos que la enfermedad ha sido en realidad una escuela, un verdadero aliado.

¿Esto significa que la enfermedad puede ser una puerta de entrada a la espiritualidad?

Así es, ya que nos hace trabajar en la búsqueda de esta curación y al trabajar en esta búsqueda, muchas veces nos encontramos con la sorpresa de que estamos cambiando, estamos reconociendo y viendo que nosotros no somos lo que creíamos, y estamos entrando en una camino de crecimiento interno que nos puede llevar a un punto insospechado de felicidad absoluta; nos puede llevar a la propia iluminación.

¿Qué es la iluminación?

Cuando me refiero a la iluminación, quiero decir a la felicidad verdadera, a la salida del sufrimiento; así lo enseñan distintas tradiciones. Muy explícita y racionalmente nos lo puede explicar el budismo, por eso yo recomiendo a cualquiera que esté en crisis que investigue el budismo, pero no el budismo como religión, sino las enseñanzas budistas como filosofía, como escuela de psiquismo, como estudio de la mente porque en el fondo, la enfermedad está en la mente y la curación también reside allí. Específicamente recomiendo la meditación Vipassana. Y para cualquiera que lo quiera seguir, este es un camino apasionante. Es por eso que la enfermedad puede ser el origen de una gran aventura, una aventura maravillosa. De hecho, la mayoría de la gente que ha llegado a salir del sufrimiento ha empezado con la enfermedad que es la crisis, y ésta los lleva a las preguntas, los miedos, los interrogantes, entonces hay que celebrar la enfermedad, claro.

¿De acuerdo con esta óptica, cuál es la función de un naturópata?

Nuestra misión es informar y propiciar los recursos necesarios para que la armonía se restaure, para que la persona que pide ayuda pueda comprender lo que ocurre en su vida, pues en el fondo la sanación es una cuestión de comprensión.

¿Y a qué te dedicas exactamente?

Me dedico a la práctica de la medicina natural y a la enseñanza de las distintas líneas dentro de la medicina natural como geobiología, radiestesia, bionutrición, recuperación visual y distintos métodos que persiguen el crecimiento interior siguiendo las leyes de la naturaleza.

¿La medicina natural es una o se trata de varias ópticas o disciplinas diferentes englobadas bajo una misma denominación?

En realidad sólo hay una medicina, así como sólo hay una enfermedad, porque si hubiese muchas enfermedades, también habría muchas curaciones, y no. Sólo hay un estado de enfermedad, aunque se manifieste con muy distintos síntomas: es la enfermedad de la ignorancia. El desconocimiento de las leyes de la armonía y del bienestar implican desconocer que somos seres espirituales encarnados, o sea, que tenemos un cuerpo, una maquina muy perfecta, pero sometida desde luego a los impactos psíquicos, emocionales, a las confusiones mentales, y a los errores en el estilo de vida que tienen como consecuencia desequilibrios que se manifiestan como síntomas, pero no hay nada más que esto.

¿A qué se debe entonces que existan tantas "terapias alternativas"?

En realidad no sólo hay confusión en la medicina oficial o académica sino que también hay confusión en las llamadas medicinas alternativas puesto que después de todo también se han convertido en medios de vida para los profesionales. Cada uno está defendiendo su parcela, si uno está trabajando con Reiki defiende el Reiki o incluso le parece la panacea o la solución, el otro está defendiendo la polaridad, el otro está defendiendo la homeopatía, o cualquier parcela del saber. Yo pienso que hay un error ahí, hay un error conceptual en el sentido de que no hay tantas medicinas, o sea solo hay una medicina y no voy a decir que sólo hay la medicina que cura porque no es verdad, es un tópico, sólo existe la medicina que armoniza y esta armonización tiene muchos planos, y entonces cada una de las terapias o medicinas puede estar trabajando un nivel pero es nefasto negar las demás. Yo creo que sólo hay una medicina repito, que sería el yoga, y no como disciplina física, sino en su profundo significado, en el sentido de conexión; que también es el verdadero sentido de la palabra religión: religar, volver a unir de una forma armónica al hombre con el cosmos; al ser, que es el macrocosmos, con el microcosmos que es el humano.

¿Y qué tan lejos hemos llegado en esa desunión del micro con el macro?

Desde luego que estamos muy lejos dado que uno de los impactos del sistema es sobre la salud del planeta, entonces estamos hablando de lo más lejos posible que ha llegado jamás la humanidad de esta armonía. Es por ello que me parece absolutamente imprescindible -ya no necesaria sino imprescindible- una revolución a todos los niveles. Esta revolución tiene que ser, por supuesto, pacífica. Una revolución que siga las leyes de armonía, y de hecho ya se está dando, sería un poco lo que llamaríamos la revolución de acuario o la conspiración de acuario. Mucha gente, muchas personas estamos ahora conspirando a muchos niveles a partir de la comprensión intuitiva que nos está llegando por todos lados, ahora sólo falta abrir los ojos, sólo falta manifestar nuestra intención de cambiar para que inmediatamente nos llegue el conocimiento por un lado o por el otro. Lo que es seguro es que esta conspiración hay que hacerla de una forma consciente, pacífica y amorosa, porque la primera ley y la única ley que realmente nos lleva a la salud es la ley del amor. Nunca sin amor tendremos salud, pero no sólo si lo recibimos, lo cual está muy bien, pero sólo tendremos salud si lo podemos dar.

¿Y en esta conspiración hay algún ultimátum establecido para la medicina académica, como tú la llamas?

Bueno, yo creo que estamos entrando en un punto en la cual la medicina oficial de pronto va a dejar de tener adeptos, tal como pasó en su momento con la iglesia católica en el postfranquismo español, por ejemplo. De pronto la iglesia dejó de tener adeptos; la gente simplemente empezó a pasar de los curas y del Vaticano; y ahora se está dando lo mismo en todo Occidente. Espontáneamente la gente empieza ya a pasar de ciertas cosas, o sea, a no hacer caso a no creerse, especialmente de los médicos. Es como una reacción espontánea y creo que habrá un momento en que la medicina, que ahora mismo se está sosteniendo por la sanidad pública impuesta por los estamentos, entrará en colapso. De hecho creo que la propia sanidad pública está entrando en un callejón sin salida a nivel económico, porque es tanto el gasto público que está generando la incapacidad médica para procurar la salud, que eventualmente ya no se va a sostener y entonces los mismos profesionales de la política van a recurrir a la medicina natural.

¿Cómo es qué comenzaste a ser naturista?

Mi experiencia fue desde luego una enseñanza, como casi siempre son este tipo de experiencias. Una gran enseñanza porque yo fui un profesional, vamos a decir brillante en su momento, dentro de mi trabajo como químico. Estaba trabajando en la industria de la alimentación, en una empresa cárnica. Había estado en diferentes empresas como director técnico, como director de laboratorio y había culminado mi carrera en la "mejor" industria de Europa en el sector de cárnicos. Mejor entre comillas. Me refiero a nivel de potencia, ya que todos los técnicos teníamos un magnífico asesoramiento y unos magníficos recursos técnicos para poder desarrollar nuestra función. Era en la época que se elaboraba el Código Alimentario español, y esta empresa tenía opinión y por tanto teníamos informaciones de primera mano sobre los aditivos alimentarios, cómo funcionaban o cómo se suponía que funcionaban y cómo planteaba la Organización Mundial de la Salud la cuestión de los aditivos en los alimentos. Aquí fue cuando empecé a darme cuenta de que la Organización Mundial de la Salud era una entidad muy poco seria en el sentido de que realmente la mayoría de aditivos no estaban estudiados o no suficientemente estudiados, los informes técnicos casi siempre acababan diciendo que no se conocían los efectos a largo plazo o no se conocían los efectos acumulativos. No obstante, se autorizaban y los pocos que se prohibían, pues tampoco se prohibían con mucho rigor. Entonces entraste por la puerta de la disidencia... De la conciencia, diría yo, pues sabía que en esa empresa cárnica estábamos trabajando con aditivos explícita o reconocidamente cancerígenos como podían ser los nitritos. Eran aditivos peligrosos que tenían efectos secundarios serios. Entonces me empecé a dar cuenta de que estaba metido en una zona bastante oscura. Estábamos envenenando gente. Así es que dejé esta empresa y me dediqué a la asesoría libre. Monté un laboratorio de análisis de alimentos, luego otro que fue el segundo laboratorio independiente de análisis de alimentos, consecuencia del Código Alimentario y de la necesidad de las empresas de analizar sus productos. No obstante, también me di cuenta de que los resultados de las analíticas eran más que dudosos porque efectuando varias veces el mismo análisis con la misma muestra, nos salían resultados bastante divergentes. Es decir, cuando replicábamos el análisis salían resultados divergentes y no había una explicación lógica y luego nos dimos cuenta de que Sanidad recogía muestras que curiosamente iban a dar al Gobierno Civil, a una instancia política, que a última hora era la que daba el visto bueno. La muestra casi nunca cumplía los requisitos de ley del Código Alimentario, no obstante, nunca vi que se denunciase a una empresa porque no era políticamente correcto en ese momento. Cuando me di cuenta de que también las instancias sanitarias estaban trabadas por intereses políticos, entré en una crisis.

¿Te enfermaste?

Sí. Mi compañera de ese momento tenía una gran depresión y yo llegué a hundirme bastante con el alcohol... Sin embargo, logré salir gracias a que me llegó una hoja escrita en la que decía que las depresiones en Estados Unidos se estaban tratando únicamente con alimentos crudos, sin fármacos. Entonces empezamos nosotros a experimentar con los alimentos crudos y así mi compañera pudo salir razonablemente de la depresión y yo empecé a entrar en un mundo en el que me fui informando de todo lo que normalmente no estamos informados. Por ejemplo, de los problemas tan graves que podía causar el azúcar, cosa que yo no me podía creer en ese momento, pero allí empecé a ver que había una línea alternativa en la alimentación y que ésta era el fundamento de la salud, no sólo física sino psíquica. Así fue como empecé a interesarme y a descubrir que había otro mundo, otra visión y comencé a estudiar, a investigar, y luego me fui a vivir al campo y desde entonces sigo en el campo y estoy en este terreno tan interesante de la naturopatía.

¿Y cuándo empezaste a ayudar a otras personas?

Bueno, yo entré ya en una un estilo de vida que llamaríamos higienista y hacía ejercicio cada día, me duchaba con agua fría, comía bien, mucho crudo, y entonces con unos compañeros empezamos a organizar un Camping Naturista en una montaña. Allí empezamos a tener ya gente que venía con problemas a estas semanas de campamento. Hacíamos yoga, ejercicios, terapias de grupo, juegos, y ya empezaba a haber gente que pedía ayuda. Y allí empezamos a ver resultados extraordinarios con la simple desintoxicación. En una semana la gente cambiaba, entraba con una depresión muy severa y salía eufórico, en contacto con la naturaleza, limpio de intestinos, comiendo bien y sobre todo con una visión distinta porque había conocido la meditación, el yoga, había entrado en experiencias de amor con los compañeros, incluso de amor físico porque, sí también fue la época, hace un par de décadas. Muchos siguieron éste camino. Nosotros empezamos a ver la importancia de mostrarlo y a partir de allí pues ya me planteé abrir un gabinete de consulta de naturopatía. Me saqué el diploma de naturopatía y así abrí un gabinete y desde entonces hasta ahora estamos trabajando en este campo.

¿En qué consiste un tratamiento de medicina natural y qué factores determinan la preferencia de una terapia sobre otra?

Nosotros ante todo tenemos que estar abiertos a la demanda, pero no a la demanda mercadológica, sino a la demanda emocional. Yo intento estar atento a lo que la persona realmente me está pidiendo, no solamente a nivel verbal sino a nivel subliminal y luego tenemos que ser lo bastante humildes como para respetar esta demanda. Entonces depende de esta demanda el que se apliquen unas terapias u otras. Pero en realidad hay un solo remedio y es siempre el mismo. El remedio es poner orden. En principio yo suelo empezar poniendo orden al plano físico y esto implica entrar primero en la fase de desintoxicación, para intentar limpiar las impurezas, las toxinas que suelen ser de dos tipos: las que generamos nosotros mismos a través de las digestiones, con alimentos que el cuerpo no sabe cómo metabolizar y las toxinas que vienen del exterior a través de la contaminación, de la respiración, de hábitos perniciosos como el tabaco, de los propios aditivos de los alimentos, etc. Después de esta fase de depuración intentamos regular la alimentación para evitar que estos impactos de intoxicación se sigan produciendo. También procuramos que la persona vaya reequilibrando los otros factores del plano físico, como son el sueño y la buena respiración que es fundamental. La Geodología entra en el mundo del reposo. La persona muchas veces descansa mal porque está sometida a una energía inconveniente en su dormitorio; por ejemplo, campos electromagnéticos o está durmiendo encima de corrientes subterráneas de agua, o está durmiendo en bandas de Hartman, etc. El Feng-shui es la técnica que utilizaban los orientales la antigua tradición china para buscar un lugar armónico, ellos sabían que no todos los lugares son iguales y que en la dicotomía de las dos energías ying, yang se manifiesta todo ser, todo lo vivo. Entonces había que tener un equilibrio entre estas dos energías, no teníamos que estar sometido a una energía demasiado yang que en este caso podía ser la energía eléctrica, ni demasiado ying como podía ser la energía del agua. Nosotros vamos y buscamos en la casa y también en el puesto de trabajo, ya que también hay muchas enfermedades provocadas por el ambiente laboral. Y luego, para que haya una buena respiración, muchas veces nos encontramos con que hay trabas de tipo estructural, de tipo postural, con el diafragma, o con lo que son los centros energéticos y entonces intentamos apoyar ahí también. La última fase sólo ocurre cuando la gente nos está haciendo caso en estos primeros estadios, entonces es cuando ya entramos en la fase de la actitud mental, de cómo la persona se expresa en su vida, cómo recibe y percibe el entorno, cómo se relaciona con los demás e intentamos hacerle ver la importancia del pensamiento positivo, la importancia de cambiar determinados esquemas, determinados paradigmas, en fin... Hasta donde nos sigue, ya que paralelamente al tratamiento, le ofrecemos también la posibilidad de venir a nuestros encuentros de crecimiento personal en donde explicamos cuentos sufíes, intentamos investigar los caminos de las distintas tradiciones y también aplicamos técnicas de meditación Anapana. Para ello organizamos encuentros de fin de semana en el campo donde también introducimos distintas técnicas como pueden ser el Tai-Chi, el Chi-Kung, la marcha andina que es una marcha de poder, el ejercicio físico, el contacto con la naturaleza, la relajación, el Yoga y otras técnicas más profundas de tipo Chamánico, y desde luego procuramos que la gente entre en contacto con lo que es la meditación Vipassana, que es la técnica con la cual Buda se ilumino, es decir, se curó.

¿O sea que un tratamiento contigo puede durar toda la vida?

Es un camino largo en el cual estamos todos los que todavía no nos hemos curado, pero ya sabemos por dónde hay que ir y entonces procuramos ayudar a los otros a encontrar el camino de la paz. Aún no llegamos, pero lo que sí os puedo decir es que estamos bien, tenemos alguna crisis más bien floja pero nosotros solemos sonreír. Nos reímos mucho y disfrutamos de nuestros hijos, nuestra familia, no tenemos demasiados problemas, y vivimos una vida sencilla, y con lo sencillo nos manejamos bien y entonces estamos cada vez mejor y esto nos manifiesta que estamos en un buen camino. Esto es importante, el mejor diagnostico que se puede hacer cada uno es preguntarse si cada vez está mejor o si cada vez se siente peor, si cada vez se siente mejor pues no está mal seguramente lleva un buen camino, pero si cada vez se siente peor, algo hay que hacer. Hay que parar, respirar un poco y preguntarse qué es lo que falla en su vida o qué es lo que se tiene que mejorar. Nosotros desde luego estamos abiertos y ofrecemos la mano a cualquiera que lo necesite, en cualquier crisis, en cualquier problema, porque una de las características de la medicina natural es que no tiene especialidades, nosotros sólo somos hermanos que hemos descubierto un camino y que lo ofrecemos a los otros hermanos que se interesen.

¿Cómo has adquirido todo este conocimiento, cuál ha sido tu formación para llegar a este punto?

Bueno, yo diría que, supongo que como cualquier profesional en su campo, yo constantemente estoy estudiando y aplicando el conocimiento, porque hace tiempo que descubrí que el único estudio que me sirve es el que uno mismo pude experimentar. Estudio sobretodo la vida. Entonces cualquier manifestación de la vida me ha interesado, he estudiado de todo, pues yo no sé, desde toxicología, homeopatía, feng-shui, geobiología... No sé, es que yo soy autodidácta, constantemente estoy leyendo, además he estado con maestros espirituales, he estado con maestros de medicina biológica por ejemplo en Colombia, tengo que citar un gran maestro para mí que fue Dr. Germandut de medicina biológica, un gran médico, pero era un gran médico que ya estaba en el otro lado de la medicina, estaba en la medicina real, la medicina de la consciencia, la medicina de la biología real... Sanji el maestro hindú, que también ahí hubo una línea de trabajo bastante interesante a nivel del espíritu, del trabajo de la tradición hinduísta. He estudiado en Polonia, en el Instituto Psicotrónico de Varsovia, todas las técnicas de radiestesia y radiónica que me han servido realmente muchísimo, La radistesia tengo que mencionarla como un elemento muy importante ya que nos empieza a abrir canales intuitivos. También he estudiado sobretodo, y sigo estudiando, las enseñanzas de éste gran maestro que fue Buda; estoy estudiando las enseñanzas del maestro Jesús, las enseñanzas de la teosofía, de las tradiciones... O sea, cualquier, persona me enseña, cualquier animal me enseña, el campo me enseña. Ahora estoy estudiando agricultura-biológica, estoy practicando en contacto con la Tierra, estoy estudiando musicoterapia, estoy estudiando chamanismo, estoy estudiando la respiración, estoy estudiando Tai-chi, con el taoísmo que me apasiona, estoy estudiando siempre todo, o sea que soy realmente un mal estudiante pero esto me permite una gran visión, una visión muy global y también me permite ver que cualquier camino profundizándolo nos lleva al mismo punto, al punto de nuestro ser. Y estoy entendiendo, a partir de tanto estudiar, que no hay nada que estudiar, que solo hay que ser y que descubrir lo que uno es y cuando uno se va quitando las capas de información, sobretodo de información intelectual, de encima entonces se llega al Ser...

¿Alguna pregunta qué quieras que te haga?

Bueno, pregúntame si soy feliz.

¿Eres feliz?

Soy razonablemente feliz y además estoy entusiasmado porque sé que puedo llegar a serlo.

Es una buena pregunta que hay que hacerles a todos los entrevistados, ¿Es usted feliz?

Claro, porque cuando haya una respuesta positiva, si esta respuesta positiva está respaldada por una vibración positiva, entonces esta persona tiene algo que decir, y algo que enseñar, escúchala.

Septiembre del 2000 /Barcelona

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